Como te decía, Omar, el amor es una enfermedad del hígado.
Pero, Edgardo, yo no puedo beber; soy alérgico.
Por eso digo...
No jodas, huevón, que yo no me morí de amor.
Esto es infumable.
Reencarnación.
Aliens.
Como te decía, Omar, el amor es una enfermedad del hígado.
Siempre el Eterno Retorno. No paso de moda y no me equivoqué.
Así habló Zaratustra.
Adiós, hola, adiós, hola
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