sábado, 31 de agosto de 2013

Camaleónico

















Soy camaleónico,
en días soleados me siento feliz y esperanzado,
todo un “happy shinny people”;
pero en días nublados
me siento triste, pesimista y hasta nostálgico.
Entonces escucho “Penélope”, “Para no olvidar”,
“No surprises”, “My body is a cage”, “Losing my religion”,
“Somewhere I belong”
y varias canciones otoñales de Nick Drake.
Son días de escribir y fumar más de la cuenta,
de pensar y, a veces, de no levantarse de la cama.
La alegría, curiosamente, no la alimento;
la tristeza, en cambio, la ejercito y la fortalezco
con cuanta canción, libro, película o pensamiento
pesimista encuentre.
Será que soy un masoquista…
o al contrario, un sádico;
porque al parecer todo masoquista
tiene una mente sádica
que se goza con sabotearse y joderse la vida
y quizá, aunque pasivamente, la de los demás.
Soy un ser camaleónico,
un animal de sangre fría,
un sádico y un masoquista,
y como escritor
-si es que merezco dicho título-
un simple exhibicionista.


fuego fatuo













Poemas como llamas de encendedor,
como cigarrillos ya fumados,
como cenizas esparcidas por el suelo; 
artefactos de apariencia inocua
pero cargados con cáncer.